jueves, 2 de junio de 2022

¿Te acuerdas de Mehdi Mahdavikia?


- Le vino muy bien disputar dos Mundiales con la selección iraní, pues eso le abriría las puertas de muchos clubes europeos, algo de lo que no todos los jugadores asiáticos pueden presumir en su vida deportiva.
A Mahdavikia le vino de lujo salir a la Bundesliga, pese a que no vivió un buen momento con el Bochum. Sus mejores años llegarían cuando fichó por el Hamburgo, para el que ganó títulos, tanto a nivel personal como en lo colectivo. Después de jugar para el Eintracht de Frankfurt, se retiraría en su país natal.

Fue sin duda uno de los mejores futbolistas iranís de su época, y seguramente de todos los tiempos. Mehdi Mahdavikia ( مهدی مهدوی‌کیا) nació el 24 de julio de 1977 en Shahr-e Rey, ciudad perteneciente a la provincia de Teherán (Irán).

Junto al nombre de Javad Nekounam, el de Mahdavikia es uno de los más populares en el fútbol europeo, un hombre que empezó en el deporte practicando balonmano, otra de sus destacadas pasiones, además del fútbol.
Decían de él que solía volar con su "alfombra mágica" para servir sus asistencias, y es que el llamado "Cohete" era un veloz extremo diestro que se lucía por sus medidos pases. A veces fue alineado como delantero, así como probó a jugar más retrasado, como lateral defensivo. La verdad es que era muy completo.

A comienzos de los noventa ya jugaba para el Bank Melli, de donde pasaría al Persepolis a mediados de la década. Con este equipo llegaría a debutar como profesional, figurando desde entonces como uno de los mejores atacantes de la época.

Se ganó la ocasión de participar en el Mundial de Francia 98, donde muchos ya pondrían sus ojos en ese futbolista persa que combinaba un fuerte ímpetu con una brillante forma de finalizar las jugadas. Y eso es lo que le llevó a Alemania.
Ficharía por el VfL Bochum, pero retornaría a Irán para representar al Pas Tehran en los Juegos Asiáticos, de los que saldría ganador. Entonces sí, el punta iraní se instalaría en tierras germanas para ponerse a las órdenes de Klaus Toppmöller, quien le otorgaría sus primeros minutos en la Bundesliga.

Mahdavikia debutó el 26 de febrero de 1999, en un partido a domicilio frente al Werder Bremen, con resultado de empate a uno. El iraní tendría tiempo a hacer 3 goles en 12 apariciones, pues no le daría tiempo para más.

Con el descenso del Bochum, Mahdavikia se uniría al Hamburgo, donde realmente iba a vivir los mejores años de su carrera. Empezaría siendo titular con Frank Pagelsdorf, llegando a anotar 4 goles en su primer año. 
Pero su mejor temporada sería la 2003\04, en la que el punta persa quedaría como máximo asistente de la Bundesliga. Aquel año quedó redondeado con la conquista de la DFB-Ligapokal, el único título importante que obtuvo con la entidad hamburguesa, pues en 2005 también se obtendría la Copa Intertoto.

En sus ocho años por Hamburgo, Mehdi se acostumbró a lo mejor, compitiendo por Europa y cumpliendo con unos registros de 211 partidos y 26 tantos. Aún no sería el momento de abandonar el país germano, ya que en el verano de 2007 se conocería su fichaje por el Eintracht de Frankfurt.

Mahdavikia concursó con Irán en dos ediciones de la Copa del Mundo.


- En el Eintracht no llegaría a brillar de la misma manera, completando dos temporadas en las que ni siquiera pudo engrosar su cuenta goleadora.  A sus 31 años, Mehdi Mahdavikia se alejaría de Alemania para volver a Irán.
Se uniría al Steel Azin, donde estuvo una temporada antes de recalar en el Sport Club Damash Gilan. El atacante regresaría a Persepolis para terminar su carrera donde la empezó. En 2013, Mahdavikia colgaría las botas para siempre.

Además de ganar la Copa AFC-OFC, Mahdavikia tuvo el honor de participar en otros campeonatos con la selección de Irán, entre los que cabe destacar los Mundiales de Francia 1998 y Alemania 2006. Fue uno de los mejores futbolistas del combinado persa, con el que afrontó 111 partidos e hizo 13 dianas.

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