De cerca: Luka Modric.

- Creo que ya conocemos de sobra a este magnífico centrocampista que, junto a Ivan Rakitic, completa un centro del campo de lujo en su selección. Futbolistas como Luka Modric hacen del fútbol puro arte. Visión de juego, gran anticipación a la pelota, pases medidos, garra, calidad, técnica, buen disparo... Puede desempeñarse en todas las posiciones del centro del campo, principalmente como volante central, mediocampista ofensivo o incluso extremo.
En mi humilde opinión, Modric es uno de los mediocampistas más valiosos del planeta. Es capaz de robar un balón y pensar al mismo tiempo donde ponerlo para crear peligro de forma inmediata. Pensador y creador de juego, todo un lujo diría yo.

Nació en la localidad croata de Zadar, el 9 de septiembre de 1985. Como muchos ex-yugoslavos de su época, Luka y su familia tuvieron que refugiarse en hoteles junto a otros afectados durante la guerra de los Balcanes. Fue duro para su familia tener que abandonar aquella casa de Zaton Obrovacki, en la que el pequeño Luka creció hasta el momento de la catástrofe yugoslava.

Modric como jugador del Real Madrid.

- La guerra pasó y los Modric decidieron retornar a Zadar, donde Luka seguiría jugando al fútbol. No le faltó el apoyo de sus familiares, puesto que el muchacho estaba empecinado con jugar al fútbol en su ciudad natal.
De padre técnico aeronáutico y madre costurera, el medio croata luchó por sus sueños mientras su familia salía de una dura crisis provocada por la guerra. Modric derrochaba talento, y eso le sirvió para entrar con dieciséis años en el mejor equipo de su país, el Dinamo de Zagreb. No obstante, no sería el momento de debutar oficialmente con el club capitalino, por lo que acabó siendo cedido al modesto equipo bosnio de Zrinjski Mostar. En 2003 debuta como profesional y llega a ser proclamado como mejor jugador de la liga bosnia durante aquel curso 2003\04. Después otra cesión, esta vez al Inter Zaprešić croata, con el que concluye en la segunda posición  de la Prva HNL (liga croata). Modric regresa al Dinamo de Zagreb y su carrea comienza ir en clara línea ascendente. Entre 2005 y 2008, el equipo croata conquista tres títulos de Liga y dos Copas. El mediocampista gana protagonismo en el equipo: se convierte en titular indiscutible, marca goles y es elegido mejor futbolista de la Prva HNL 2006\07.

Como es lógico, el nombre de Luka Modric cobra mucha fuerza en Europa, y pronto surgiría una oferta irrechazable desde Inglaterra. El Tottenham Hotspur pagó 20 millones de euros a la entidad balcánica para que éste se comprometiera con los ingleses por cuatro temporadas.
En esos cuatro años, el mediocampista croata brilló con luz propia en la Premier League. Quitando el infortunio de lesionarse por una rotura de peroné, Luka continuó realizando magníficos números con los Spurs, lo que provocó el interés de hacerse con sus servicios a los clubes más grandes de Inglaterra, además de otros europeos.

Pero Modric no seguiría en tierras británicas más allá del año 2012. Desde España llegaron ofertas. El Real Madrid pujó fuerte por el croata, éste se declaró en rebeldía para presionar al Tottenham, y su traspaso al conjunto blanco no tardaría en hacerse realidad. El Madrid se llevó al jugador a finales de agosto de 2012.

Modric gana importancia desde su primer ciclo en el club de Chamartín. En España, su figura cada vez se hace más grande y empiezan a llegar los títulos: dos Ligas de Campeones, dos Supercopas de Europa, una Supercopa de España, un Mundial de Clubes y una Copa del Rey. El reto del balcánico es conseguir una Liga vistiendo de blanco y, de momento, la campaña 2016\17 va muy bien encarrilada.

Modric es seguramente uno de los mejores centrocampistas europeos, todo técnica y calidad.

- Lo de su experiencia internacional ha sido coser y cantar. Con semejante cartel, a Modric no le costó entrar en el combinado arlequinado. En 2006 debuta en amistoso contra Argentina, y en ese mismo año ya acudió al Mundial de Alemania. Con sus 31 años ya ha participado en dos Mundiales (Alemania 2006 y Brasil 2014) y en tres Eurocopas (Austria-Suiza 2008, Polonia-Ucrania 2012 y Francia 2016).

Croacia, una selección llamada a dar mucha guerra, aún no consiguió superar los cuartos de final en un evento internacional de suma importancia. Jugadores de la talla de Rakitic, Mandzukic, Srna o el propio Luka Modric, no han podido superar el reto de sus antecesores en 1998 (Francia), en un Mundial en el que la selección croata ocupó el tercer lugar. Para Modric aún hay tiempo... y sobre todo calidad.